Central Park

Uno de los aspectos más destacados de su diseño es la inclusión de paisajes diversos que parecen naturales pero que fueron meticulosamente planificados. El parque también cuenta con 7 cuerpos de agua artificiales, como el conocido Jacqueline Kennedy Onassis Reservoir, que ofrece vistas espectaculares al skyline de Nueva York. En cada esquina, Central Park invita a la exploración y a la contemplación de su riqueza paisajística.

Un paseo por su historia

Central Park fue inaugurado en 1858 como el primer parque público paisajístico de los Estados Unidos. Diseñado por Frederick Law Olmsted y Calvert Vaux, el parque nació como una respuesta a la necesidad de un espacio verde en una ciudad que crecía rápidamente. Su construcción implicó la remodelación de terrenos pantanosos y la creación de un entorno artificial que pareciera completamente natural.

El proyecto, financiado en gran parte por la ciudad de Nueva York, representó un esfuerzo monumental en su tiempo. Más de 20.000 trabajadores participaron en la transformación del terreno, utilizando técnicas avanzadas para la época, como la dinamita, para dar forma al paisaje. Además, se plantaron miles de árboles y arbustos para recrear un ambiente bucólico dentro de la urbe.

Con el paso de los años, Central Park ha sido testigo de numerosos eventos históricos y culturales, desde conciertos al aire libre hasta maratones y rodajes de películas icónicas como ‘Home Alone 2’ y ‘When Harry Met Sally’. En las décadas de 1970 y 1980, el parque enfrentó problemas de deterioro debido a la falta de financiamiento y mantenimiento, pero gracias a la creación de la Central Park Conservancy en 1980, una organización encargada de preservar la naturaleza verde de este sitio, el parque ha sido restaurado y mantenido como uno de los destinos más queridos de Nueva York.

¿Cómo Llegar a Central Park?

Llegar a Central Park es sencillo debido a que se encuentra en Manhattan, un distrito muy céntrico. El parque se encuentra delimitado por la Quinta Avenida al este, Central Park West al oeste, la calle 59 al sur y la calle 110 al norte.

Las formas de llegar son muy diversas. Si te preguntas cómo llegar a Central Park en metro para vivir la experiencia real neoyorquina, las estaciones más cercanas son 59th Street-Colombus Circle (líneas A, B, C, D y 1), 72nd Street (líneas B y C) y 86th Street (líneas 4, 5 y 6). Estas opciones te dejan en diferentes puntos de acceso al parque, según lo que quieras explorar.

Si prefieres llegar en autobús, hay numerosas líneas de buses urbanos que tienen paradas a lo largo de las avenidas que rodean el parque, facilitando la llegada desde diferentes zonas de la ciudad.

Por último, si no quieres perderte ningún rincón de la ciudad y quieres moverte a pie o en bicicleta, es posible. Si te alojas en un hotel en Nueva York cercano a Midtown, entonces puedes llegar disfrutando de un paseo por las icónicas calles de la ciudad. Si prefieres moverte en bicicleta para aprovechar el tiempo al máximo, en los alrededores del parque hay disponibles diferentes establecimientos para el alquiler de bicicletas.

Qué ver en Central Park

Central Park es un sitio obligatorio que ver en Nueva York por todos los lugares icónicos que tiene.

Entre los puntos más destacados de Central Park se encuentra Bethesda Terrace and Fountain, un impresionante conjunto arquitectónico que es el corazón del parque. Este lugar es ideal para tomar fotos y relajarse, y desde aquí puedes disfrutar de vistas al lago y presenciar a menudo actuaciones de artistas callejeros. Otro lugar icónico es Strawberry Fields, un memorial dedicado a John Lennon donde se respira paz y se escuchan melodías interpretadas por músicos locales. Este espacio es un homenaje al legado del ex Beatle y está ubicado cerca del edificio Dakota, donde residió.

El Belvedere Castle es otro atractivo imperdible. Este pequeño castillo ofrece vistas panorámicas de los alrededores y es un punto ideal para fotografías. Además, alberga un centro educativo donde los visitantes pueden aprender sobre la fauna y flora del parque. Por otro lado, The Mall es un paseo arbolado que conduce a Bethesda Terrace y que resulta especialmente bello durante el otoño, cuando los árboles se tiñen de tonos rojizos y dorados. También es un lugar popular para rodajes y eventos culturales. Finalmente, The Great Lawn, una de las praderas más amplias del parque, es perfecta para picnics, deportes o simplemente relajarse bajo el sol.

Central Park está abierto todos los días del año, desde las 6:00 a. m. hasta la 1:00 a. m. La entrada es gratuita, lo que lo convierte en una de las actividades en Nueva York más accesibles y gratificantes.

Además del interior, también puedes visitar otros lugares emblemáticos de la ciudad ya que se encuentra en el medio de la ciudad. Muy cerca se encuentra el Top of the Rock, un mirador con unas vistas impresionantes de la metrópoli y su contraste con la vegetación de Central Park. También es imprescindible que visites el Empire States Building, el rascacielos más icónico de Nueva York.

Actividades para hacer en Central Park

Una de las actividades más populares en Central Park durante los meses de invierno es el patinaje sobre hielo en las pistas Wollman Rink y Lasker Rink. La experiencia de deslizarse sobre el hielo con el skyline de Nueva York como telón de fondo es inolvidable, especialmente al atardecer, cuando las luces de la ciudad comienzan a brillar.

En primavera y verano, el parque se llena de vida con actividades como picnics, paseos en bote en el lago y espectáculos al aire libre. Los ciclistas y corredores también disfrutan de sus amplios caminos, mientras que las familias pueden visitar el zoológico de Central Park, un lugar encantador para los más pequeños.

El parque también ofrece actividades culturales y deportivas a lo largo del año. Desde conciertos gratuitos en el SummerStage hasta obras de teatro al aire libre, siempre hay algo que hacer en Central Park. Además, las visitas guiadas, ya sea a pie, en bicicleta o en carroza, son una excelente forma de conocer la historia y curiosidades del parque.